jueves, 9 de abril de 2020

Jueves Santo


 La primera fotografía ha sido publicada en el Libro de Historia de  Valenzuela. Corresponde a la imagen de Jesús quemada en 1936, Según me contaban, tenía el brazo derecho articulado para dar la bendición.  
   No conozco las causas que hicieron desaparecer la tradición de disfrazar de Boabdil al Haemano Mayor de la Cofradía de Jesús. Supongo que pudo ser la mayor severidad de la Iglesia a partir de la Guerra Civil, que la consideró como una irreverencia.

Se afirmaba que la actual imagen de Jesús fue tallada por un maestro destinado en Valenzuel. Pablo García Baena se refiere a ella en el poema A solas con tu lámpara, dedicada a Josefina Liébana.
La iglesia es limpia y pobre. Nuestro Padre Jesús
con su pelo de niña y almidón en la enagua,
perdona a las benditas almas del purgatorio.




    Los versos se explican porque la talla permanecía hasta Semana Santa en un camarín que presidía la nave del evangelio (en Valenzuela, de Jesús), donde se encontraba el Purgatorio, pintura de Ginés Liébana. En la otra nave lateral, Josefina, hermana de pintor, se encargaba de montar el monumento  cada Semana Santa.



    Hasta la donación del paso de Jesús en el Huerto, Nuestro Padre Jesús salía en procesión los Jueves Santos junto a un olivo que sostenía varias frutas del tiempo, naranjas y limones, que en la mañana siguiente servirían como fruta prohibida. (Una saeta comenzaba con “Qué bonito que va el huerto con naranjas y limones”).


A mediados de los sesenta donaron la imagen de Jesús en el Huerto. Debido a lo excesivo de su peso, algunos años salió en procesión sobre ruedas.  

 

Poema de Francisco Velasco Rey


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